Fue imposible sacar tu recuerdo de mi mente. Fue imposible olvidar que algún día yo te quise… Tanto tiempo pasó desde el día que te fuiste, y allí supe que las despedidas son muy tristes. Nunca me imaginé que un tren se llevara en su viaje aquellas ilusiones que de niños nos juramos, todos tus sentimientos los guardaste en tu equipaje… Podrán reclamarle de todo al profe ‘Chicho’, podrán criticar sus formas y decisiones, pero algo que es innegable para cualquiera, es el amor que le tiene a la institución y todo lo que le dio como jugador y como técnico, difícilmente podamos volver a verlo.
No es necesario ser “chichista” para darse cuenta el maltrato que recibió el profe por parte de quienes manejan al club e indignarse por eso, el hecho de que se ventile su salida antes de que se lo digan directamente a él, junto al rumor que periódicamente llegaba sobre que “no lo querían” no es algo que merezca alguien que le dio tanto a Alianza, como lo dije al inicio, se podrá criticar algunas decisiones y formas de juego, pero eso no justifica dicho atropello y peor aún, cuando los “benditos fríos” números lo respaldaban.
Por el afán de buscar el bendito “jogo bonito”, terminaron echando a un técnico que NUNCA perdió un partido de local en Liga 1, que cortó la jodida racha en copa, ganó en una plaza siempre complicada como Cuzco, que solo una vez perdió en Lima, que en solo 9 meses nos hizo gritar campeones 3 veces. De verdad que quiero entenderlo, pero no puedo, los números respaldan al profe, pues como dijo alguna vez don Pablo Javier: “el futbol se juega para ganar, no para dar espectáculo” y a quienes vivimos tantas campañas sin haber campeonado a fin de año, creo que no nos importa si ganamos 20 a 0 con goles de puras chalacas y tacos, lo único que importará siempre es esa bendita vuelta olímpica a final de temporada. Al final, en la historia y en los registros quedará siempre el que gritó campeón y alzó la copa, no el que jugó “más bonito”.
Para los hinchas que van al estadio desde el 2017 piensan que las malas es perder un partido en Huancayo o empatar un clásico de local, esos que hasta el martes jodían y jodían por la salida de Chicho y que luego empezaron a llorar porque se dio lo que tanto pedían, son los primeros que empezarán a extrañarlo si no se dan resultados en los primeros dos partidos, porque así son, esa es su naturaleza, ellos no han vivido lo que muchos pasamos años tras años previos al cambio que llegó con Bengoechea. Ahora todos viajan, todos son tribuneros netos, todos son los más fieles del mundo, pero pregúntales dónde estuvieron del 2007 al 2016 y empezarás a escuchar el programa “mil maneras de excusarse”.
En fin, desde aquí solo me queda agradecer siempre al profe Chicho por rescatar un año que muchos daban por perdido, por habernos dado esa alegría de cortar la maldita racha en copa, por habernos dejado encaminado el sueño del tricampeonato y por tanto amor hacia el club que amamos. Gracias por tanto y perdón por tanto idiota.
¡Arriba Alianza!
Por: men‘TETRA‘bada