Já já já que risa me da lo que se dice de mí, lo que se habla por ahí… En días y situaciones así, lo único que queda es reírse, reírse de lo que se dice, reírse de todo el lloriqueo y pataleta que hace tanto llorón que después de haberse sentido campeón con dos partidos más, hoy se arrancan los pelos al volver a su realidad, pero esto engloba algo mucho mayor, pues hasta acá se huele el miedo que tienen de que el equipo del pueblo se despunte en el podio de campeonatos y eso, eso es lo que más les atemoriza.

Luego del partido del día lunes, empezó a inundarse las calles (y las redes) por todo el llanto que llegó, ¿por parte de los hinchas del Municipal?, no, amigos, pues resulta que los que vienen fecha a fecha cambiando el color de su camiseta, dependiendo el rival de turno del cuadro blanquiazul, ahora se hicieron los dignos, los más perjudicados por la CONAR, ahora resulta que los que se salvaron del descenso en el 2018 luego de las ayudas arbitrales, ahora salen cual niños llorones de kínder a patalear y no es más que puro llanto de desesperación, pues su “gestión” se va viendo amenazada por la verdadera GESTIÓN.

Al hincha blanquiazul, solo decirle que está por demás seguir cayendo en ese juego, si bien es cierto ha habido errores “a favor” de los dirigidos por el ‘profe’ Chicho, también han existido errores en contra, y eso, los analistas improvisados de Twitter, Facebook y Tik Tok, no te lo van a contar, porque sencillamente eso no vende. Por eso, querido pueblo aliancista, dejemos que hablen los habladores, dejemos que hablen lo que hablen, digan lo que digan, si ellos están abajo y NOSOTROS estamos arriba.

 ¡Arriba Alianza!

Por: men‘TETRA‘bada