Territorios Íntimos: FIAT LUX

Para quien escribe, habrá siempre un lugar en la memoria para las viejas torres de iluminación de Matute, aquellas que se adornan dibujandose un AL al encenderse.

Infinidad de noches blanquiazules iluminadas por las cuatro torres que se convirtieron parte del paisaje urbanístico de La Victoria. Ya a lo lejos se veían encendidas esperándonos.

Ahora, toca el turno de las nuevas, que poco a poco, una por una, se irán colocando para así cumplir con el reglamento internacional y poder jugar torneos en horario nocturno en nuestra cancha, como corresponde, iluminando nuevos recuerdos.

Casi todos los estadios en el mundo tienen algo en su arquitectura que los distingue, y no dudo que en el caso de Matute son las cuatro torres (un «tetra», casualmente) las que lo hacen particular. Ver las imágenes de cómo se iban desmontando cargaban de nostalgia mis ojos, pero también se llenaban de emotividad por el futuro al ver las nuevas e ir imaginando las noches blanquiazules iluminadas y cargadas no solo de la luz de las nuevas, sino de la luz de mi amor por los colores.

A esperar, entonces.

Y arriba Alianza.

Por: Metalgrone

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