Ayer era uno de esos días donde el hincha hizo que una hazaña en Brasil sea mas posible de lo imaginado. Los programas de YouTube, los espacios, los posts de cada uno de los hinchas que hasta decían que apostaban con tal que Alianza Lima ganaba en Belo Horizonte. Fue un día extraño para alguno que no esta acostumbrado a tanto optimismo, pero era necesario para que veamos un duelo con esa confianza. El hincha hizo lo suyo, pero el equipo no en lo completo.
Alianza Lima de Guillermo Salas, descansado y puntero tenia que enfrentarse a un Atlético Minero que venia con muchos problemas. Estaba con 0 puntos en el certamen continental y venia de caídas en el Brasileirao. El escenario estaba para que una derrota más genere una crisis deportiva en el equipo Brazuca y la salida de muchos integrantes en el equipo. El rival se presentaba en una situacion favorable, pero el equipo no respondió.
En los primeros 45’ se vio a un Alianza Lima que desde la primera jugada entendimos cual iba a ser el plan: aguantar el cero. ¿Valido? Completamente. A medida que iban pasando los minutos en menos de 20 ya Mineiro habia llegado 4 ocasiones de cara clara al arco de Ángelo Campos, quien apareció en más de una ocasión para evitar la conquista del arco grone. Merito tambien de un Carlos Zambrano, que, si bien tuvo errores en salida, para aguantar al rival y defender, hizo lo suyo.
El equipo en el sector defensivo mostró muchas falencias. Desde ‘Richi’ Lagos que una vez más fue sobrepasado por los extremos en una Libertadores, un Gino Peruzzi que no terminó de entenderse por momentos con Santiago García que hizo un partido regular. En la volante, la falta de físico en J. Ballón, la inexperiencia de J. Del Castillo y el bajo rendimiento de A. Andrade generó a que tampoco las opciones de peligro sean claras. Eso lo entendió Pablo Sabbag que muchos pasajes tuvimos que verlo retroceder para tratar de encontrar una pelota de peligro.
De los errores nace el penal para A. Mineiro. Cuando ya se habia cumplido el tiempo extra, un córner – generado por una desatención en defensa – para Mineiro que se convirtió en un centro que fue mal decepcionado por la defensa aliancista que no le quedo de otra que hacer la falta. Todos pensamos lo peor, hasta que apareció nuestro ángel. El que impidió que en 45’ estemos debajo del 2 o 3-0. Ángelo Campos quien evitó que Hulk anote de penal y con eso… con esa fe y el hype arriba nos íbamos al descanso sin goles.
Lamentablemente el equipo no reaccionó. Iniciado el 2do tiempo, rápidamente a los 59’ y a los 68’ Igor Gomes se volvió nuestro ogro, el demonio que nos terminaría de quitar ese sueño de una eventual victoria histórica en Brasil. En menos de 70 minutos ya el equipo perdía 2-0.
Despues del segundo gol, los restantes minutos fueron de puro tramite y compromiso. Atlético Mineiro intentaría un par más, pero no con la misma intensidad como la que jugó los primeros minutos y Alianza Lima – pese a que hizo cambios – desistió el buscar el descuento o la hazaña. Condujo el balón en area rival, pero sin profundidad. Final del partido, nos íbamos con la maleta vacía y un sabor que se pudo hacer otro partido.
En un momento la idea de Alianza Lima de rescatar el punto en Brasil fue buena, pero no podia ser el libreto de 90 minutos. Si vas a jugar a defenderte ante un equipo brasileño que sale con obligación de ganar y no haces cambios hasta los 70 minutos, no esperes ganarlo.
En algún momento nos iba tocar saborear la derrota. Lo que debe ocurrir ahora es lo que un equipo grande hace frente a una derrota, aprender de los errores y prepararnos para los partidos de vuelta. Nos quedan 3 juegos por la Libertadores, 2 en nuestra casa y una ultima salida a Brasil. Esto no acaba, pero si queremos que aún dure debemos mejorar mucho aún.