Asunción: Elevación, generalmente del espíritu. Acto de ser ascendido a una de las primeras dignidades, como el pontificado, el imperio, etc., por elección o aclamación.
Tenia que llegar este día, lo que muchos nos tienen mas alegres de lo usual es que ese día haya llegado tan pronto y en una circunstancia que muchos no hubieran dado como favorito a Alianza Lima. Nos tocaba enfrentar a Libertad de Paraguay, equipo invicto en el año. En una plaza como Paraguay que solo hemos obtenido 1 victoria de 4 visitas y que esa fue hace 20 años. Llegábamos con jugadores aun en recuperación y en el último minuto con cambios forzados en defensa. ¿Panorama poco alentador, cierto?
El partido al final tenia que jugarse. El equipo de Guillermo Salas salió al campo con mucho criterio y pasividad para enfrentar al local. Fueron 45 minutos iniciales donde estuvimos tanteando y toreando. Dejamos jugar mucho, dimos el balón al rival a que nos trate de atacar y con la misma cautela buscábamos encontrar un espacio al gol. Ninguno de los 2 equipos logró hacerse daño en 45 minutos. Con un Ángelo Campos como figura, un Libertad insatisfecho y una posesión de balón de 63 a 27 a favor de los locales, concluiría el 1er tiempo.
El inicio del segundo tiempo fue GOOOOOOOOOOOOOOOL DE ALIANZA LIMA…GOL DE ALDAIR ¡RODRIGUEZ! ALDAIR ¡RODRIGUEZ!……si, así de sorpresivo. Muchos antes de arrancar el segundo tiempo, pensábamos que el negocio de Alianza iba a ser el empate. Volver a aguantar y por ahí tratar de ir al contragolpe. El segundo tiempo fue un cambio rotundo. Un Alianza Lima atrevido con Andrés Andrade quien recuperó mucho el balón y creó situaciones de gol y un Aldair Rodríguez que fue el MVP del encuentro. El 1er gol unió la habilidad de ambos. Un ‘Rifle’ que cobra rápidamente un tiro libre en el mediocampo que habilita a ‘La Pantera’ que se hace con la banda derecha, y ni la marca de dos lo impide para anotar. Gol de Aldair Rodríguez, el hombre que volvía de la sanción contra él el año pasado. Una asunción de los infiernos a la gloria de la redención.
La segunda mitad tendría mas pasajes. Como el segundo gol de Aldair Rodríguez, quien despues de una pelotera en el area tuvo chance de empujar el balón al arco rival, pero este seria anulado por el VAR tras verse que previo al gol Pablo Miguez cometió una falta.
En menos de 50 minutos, Alianza Lima dominaba el partido, quizas no con la posesión de balón, pero si con las acciones de peligro claras, dejando claro que era posible ganarle a este rival. Fue que las ansias de anotar se encendieron en el equipo, pero principalmente en el goleador. Pablo Sabbag a los 71’ tras una recuperación extraordinaria de Reyna y Andrade, para que Aldair habilite a Pablo Sabbag y lo ubique en el ángulo perfecto de anotarse un golazo fuera del area, imposible para el portero Martín Silva. Gol del ‘Jeque’ que ponía a sus pies a los paraguayos. Alianza Lima conseguía el 2-0 que los ponía a minutos de la redención.
Ya saben que – aunque es un mal concepto – el hincha de Alianza “tiene que sufrir” y paso así en los minutos de descuento. Tras el gol de descuento marcado por Oscar Cardozo de penal, las alertas se encendieron y Libertad buscó en 2 oportunidades marcar el empate. Aquí es donde toca marcar la gran labor defensiva de Zambrano y Peruzzi quienes entendieron como es que se marca en una competición de Libertadores. Sin muchos aspavientos, llegaría el final del partido. Alianza Lima lo ganó 2-1 y soltamos una jodida mochila de 30 partidos internacionales sin ganar.
Cuando hablamos de asunción, es de un acto de elevación hecho en ayuda de terceros. Hoy Alianza Lima fue asunto del hoyo en el que se encontraba. Ayudado por su comando técnico encabezado por Guillermo Salas que si no es un “DT de jerarquía” se está convirtiendo en uno. Ayuda de todo este plantel que si bien no es culpa de muchos el que alianza haya tenido esta mala racha, entendieron que era uno de los objetivos urgentes del club, y, por último, pero no menos importante, ayudados por los mas de 500 a 1000 personas que acompañaron en el Defensores del Chaco. No recuerdo un partido donde Alianza Lima haya sido tan local como ayer. Llevaron la fiesta, los canticos y se llevaron los 3 puntos como recompensa. Alianza Lima puede sonreír, puede festejar, pero no volver a cometer los errores del ayer. Que este reseteo nos ayude a reconstruir la reputación internacional de nuestra institución.