Arrancó un 2023 movido, cargado de emociones para el pueblo blanquiazul. A la alegría incomparable del bicampeonato, se sumaron problemas sociales y dirigenciales (promovidos por un impresentable revendedor) que impiden el inicio de la liga y como dejar de mencionar el nostálgico anuncio del retiro de un hijo de Matute, del mejor jugador peruano que pude observar como es Jefferson. Nos encontramos viviendo una época de crecimiento institucional, donde nuestro querido Alianza parece sacar pasos agigantados a sus competidores locales. Prueba de ello es el plantel que se armo para la presente temporada, en una gestión digna de destacar del área de futbol del club y que tiene como metas el tricampeonato y dar una mejor imagen en copa libertadores con respecto a años anteriores.

En primer lugar, tenemos arqueros. El “mono” Campos se encuentra consolidado en el arco victoriano. Es un arquero de equipo grande, de mucha personalidad, de los que sacan las 2 o 3 que puedan generar los rivales. Sin embargo, su suplente no se la deja fácil. Franco Saravia fue la gran sorpresa del 2022, donde tras destacados partidos incluyendo una triple atajada ante Cristal puso en jaque la titularidad del mono para muchos hinchas. Con ambos el arco esta seguro. No obstante, no todo puede ser idóneo y el club anuncio el retorno de manera inexplicable de Ítalo Espinoza quien valgan verdades es muy poco probable que tenga minutos en la presente temporada.

En según lugar, a la defensa con menos goles en contra del 2022 se le sumaron 2 baluartes como el Santi García y el “león” Carlos Zambrano. Pensando rápido, muchos creerían que esta será la zaga de centrales titular, sin embargo, considero que un par de amistosos no borran 2 años notables de Vílchez. La disputa por quien será el acompañante del “Kaiser” será reñida y le traerá mas de un sano dolor de cabeza al buen “Chicho”. Un paréntesis con respecto a Zambrano, quien quiere venir, viene. A ellos se les suma un correcto Miguez, que termino el 2022 como titular y demostrando que aún tiene con que aportarnos. Por otro lado, tenemos buenos laterales. Gino Peruzzi dio catedra de lo que es ser un lateral en nuestro futbol desde el primer minuto que se puso la camiseta y aunque para algunos Richi Lagos polarice, es de los mejores en su puesto.

Con respecto a la volante, es donde mas hemos crecido en cuanto a nombres. Al tridente Ballon, Concha (nuestro nuevo 10) y Lavandeira (el corazón del Alianza 2022) se le suma el 10 del Atlético Nacional, el “rifle” Andrade al que le bastaron pocos minutos en los amistosos para mostrar su categoría. Si buscamos un perfil mas defensivo, al correcto Valenzuela se le suma un jugador que creo que dará que hablar como Jesús Castillo. En ese sentido, aquí es donde quiero hacer un énfasis, el área de futbol logro el retorno de Gabi Costa. El club lo quiso y aunque en un momento parecía todo perdido cuando el presidente de Colo Colo anuncio su renovación, Alianza no desistió en su interés logrando que Gabi vuelva al lugar de donde nunca se quiso ir. Por el otro extremo, tenemos a un jugar picante como Reyna, que si logra pulir sus decisiones finales será un arma importante. Asimismo, en esa línea tenemos jugadores interesantes y de buen 2022 como Pinto, Zanelatto y el chaval Benavente a quien desde esta humilde tribuna le deseamos una pronta recuperación.

En la delantera, Alianza pone su fe en un 9 que viene de marcar 15 tantos en el futbol colombiano como Sabbag. El “jeque” es la apuesta para la copa: potente, con buen juego y de gran remate de zurda son algunas de sus características. A él se le suma un empeñoso Aldair Rodríguez y 2 prospectos que fueron pieza clave del campeonato de reserva como Goicochea y Pineau (quien se encuentra definiendo su futuro mientras desarrollo este texto). ¿Me olvido de alguien? Pues para nada. Hernán Barcos merece una mención aparte. El “pirata” encontró en Alianza una segunda juventud y es la gran imagen del Alianza Lima bicampeón. Es el líder que nos merecíamos, mejor jugador y goleador ambos años. Un señor con todas sus letras y quien a mi juicio ya es ídolo blanquiazul. Hay postales que quedan en la historia y la de Hernán anotando el gol del triunfo en Ayacucho y luego atajando los minutos finales quedará para siempre en la retina de los hinchas, dándose incluso el lujo de hacer un “Rivadeneyrazo”. Ojalá pueda cerrar su carrera en Alianza, se lo merece.

Finalmente, un criterioso Guillermo Salas se lleva los elogios. Supo meter mano a un plantel dubitativo y logro sacar lo mejor de ellos. Tiene la tarea de repetir lo hecho el año pasado y armas le sobran.  Si bien, nadie es campeón antes de jugar, es inevitable no ilusionarse con lo expuesto líneas arriba. Hemos demostrado que cuando hinchada y jugadores estamos centrados en un mismo objetivo, todo es posible. Venimos de un año jugando a estadio repleto y este 2023 promete seguir igual. Con la instalación de las luces, Matute debe ser la caldera que siempre fue y ser ese plus para afrontar la copa. Ilusiona este 2023: tenemos plantel, comando técnico e hinchada para soñar. ¡Arriba Alianza!

Por: Ruben Manco (@rubenmancof)